Laroya coge en sus entrañas a las Casas Rurales Picachico, posee un término municipal de bellísimos parajes. Cuenta con una iglesia mudéjar del siglo XVI cuya historia define por sí sola el emplazamiento del pueblo ya que, debido a la dificultad de transportar los materiales desde el valle por escarpados caminos y precipicios, se realizó una tejera junto al río donde pudieran fabricarse ladrillos. Nuestras casas rurales y Laroya te hechizarán.
Las calles de Laroya, junto con su paisaje, son en sí mismos monumentos de la localidad por su belleza y esplendor moriscos. Tiene un promedio de 319 días de sol, 319 noches de estrellas al año. Disfruta de veranos cálidos con noches fresquitas e inviernos con alguna nevada.
Laroya fue noticia hace unas décadas por un curioso fenómeno natural que no ha vuelto a reproducirse, pero que tampoco pudo quedar aclarado por los estudiosos e informadores que acudieron a contemplarlo, unos extraños fuegos que, en el paraje de Fuente el Saz, surgían al azar, de forma espontánea, y que llegaron a quemar la mies recolectada, parte de las cosechas y hasta las ropas y herramientas de trabajo de algunos de los curiosos a los que atrajo. Un extraordinario misterio que aún permanece en ese lugar de los fenómenos no aclarados.